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miércoles, 28 de mayo de 2014

So Cruel



“ We crossed the line
Who pushed you over
It doesn't matter to you
It matters to me…”




La tarde había cursado apacible, tibia y sin sobresaltos. Como todos los miércoles desde hace 3 años, Julio arquitecto de 33 años,  llega al consultorio 5 minutos antes de su cita con la expectativa de iniciar a las 21 hrs en punto. Salgo a recibirlo sin darle la mano, pues darle la mano implica reactivar la misofobia.

Cuando le conocí abusaba de alcohol como recurso contrafóbico pero su principal obsesión, la contaminación por gérmenes, lo incapacitaba gravemente de tal forma que le era imposible salir por meses de una habitación por el terror a enfermar de A1HN1.

Los rituales compulsivos de descontaminación eran tan violentos que le causaron dermatitis grave en manos, cara y pies, sus relaciones personales se redujeron a su madre viuda desde que Julio tenía 3 años de edad y a mí que lo asistí inicialmente en su domicilio. Al día de hoy su vida es funcional. Sus relaciones sociales son superficiales y distantes, sus relaciones de pareja son  intensas, cortas y poco significativas.

No soporta la soledad y su éxito como

martes, 27 de mayo de 2014

La utopía de la legalización


Se debe partir de la consideración que el uso de dogas psicoactivas está asociado en distintos niveles a la evolución del ser humano y la sociedad, a tal grado que el consumo o su restricción es fácilmente identificable en una aproximación histórica no especializada. Revisando la evolución cultural en distintos grupos sociales y en diferentes momentos históricos existe un punto en común: Legalizar las drogas con el objeto de regular la oferta y su consumo es una utopía que responde en su construcción a una lógica económica sustentada en excipientes políticas de salud pública, desarrollo social y seguridad que en su mayoría dejan de lado una discusión seria que promueva una comprensión amplia de los diversos fenómenos que entraña el consumo.

Regular implica separar el mercado de las drogas y proteger a los consumidores otorgándoles certidumbre, información y garantías sobre la calidad de lo que se consume. En mi experiencia los consumidores no buscan ser protegidos, no van tras la búsqueda de certidumbre sino de novedad, regularmente están bien informados y no buscan garantías de pureza sino de un potente efecto inmediato. La cantidad de consumo y la frecuencia, con los riesgos de dependencia o abuso dependen de la voracidad del sujeto.


lunes, 26 de mayo de 2014

¿Legalizar o Regular? Parte 2





El informe Mundial sobre Drogas de 2010 señala que la marihuana continúa siendo la droga que más se produce a nivel mundial y la sustancia ilícita de mayor consumo en casi todos los países del mundo. En la actualidad, entre 130 y 190 millones de personas la fuman al menos una vez por año.

La Encuesta Nacional de Adiciones 2011 reporta que en población adolescente de 12 a 17 años la prevalencia de consumo de drogas ilegales es de 1.6%, con relación al 2008 la prevalencias se mantiene baja. Como en la población adulta, en los adolescentes se observa que el consumo de marihuana es el más prevalente (1.3%), le sigue la cocaína (0.4%) y los inhalables (0.3%).

Aunque la prevalencia de consumo es considerada baja, el patrón de consumo sostenido y con tendencia al abuso depende no sólo de la cantidad sino también de factores genético-sociales y de la edad de inicio